Guangzhou atraviesa una gran crisis en el fútbol Chino

El fútbol chino atraviesa una crisis significativa, evidenciada por la reciente exclusión del Guangzhou FC de las ligas profesionales debido a deudas acumuladas. Propiedad del gigante inmobiliario Evergrande, el club no pudo solventar sus obligaciones financieras, reflejando la caída de la burbuja inmobiliaria en China.

Esta situación ha llevado a la desaparición de alrededor de 30 equipos desde 2020, afectando la estabilidad y el desarrollo del fútbol en el país.

El declive del Guangzhou FC, campeón de ocho títulos de la Superliga China y dos Ligas de Campeones de Asia, marca el fin de una era de grandes inversiones en fichajes internacionales. Las autoridades chinas ahora promueven una inversión más sostenible y un enfoque en la cantera para garantizar el éxito a largo plazo en el fútbol nacional.

La crisis financiera y el impacto de la pandemia han exacerbado los problemas en el fútbol chino, llevando a la desaparición de numerosos clubes y afectando la calidad de la competición. La Asociación China de Fútbol (CFA) planea reformas, como la separación de su gestión administrativa y las operaciones de la liga profesional en 2025, además de flexibilizar las restricciones a jugadores extranjeros y potenciar el fútbol base.

El Gobierno ha definido metas a largo plazo, como integrar educación y deporte, con objetivos para 2025, 2030 y 2035, respondiendo a los deseos futbolísticos del presidente Xi Jinping: clasificar a un Mundial, ser anfitrión y ganar un campeonato antes de 2050.

La desaparición del Guangzhou FC deja al profesionalismo chino con solo tres clubes fundadores en activo: Shanghai Shenhua, Shandong Taishan y Beijing Guoan, de los 12 que comenzaron la era del profesionalismo en el gigante asiático.

La crisis en el fútbol chino refleja la necesidad de una reestructuración profunda y un enfoque más sostenible para garantizar su desarrollo y éxito a largo plazo.